Durante su tiempo en Ciudad de México, Halle Bailey se deleitó con su estancia. La talentosa actriz no solo tuvo la oportunidad de compartir momentos especiales con sus apasionados seguidores en una concurrida plaza, sino que también vivió una celebración única en el restaurante Porfirio's, ubicado en la encantadora zona de Polanco.
En este evento tan esperado, Halle no solo disfrutó de la compañía de sus fans, sino que también se sumergió en una experiencia culinaria al saborear una selección de platos típicos mexicanos. Llena de alegría y entusiasmo, la actriz brindó por el futuro éxito de la película de La Sirenita, en la que interpreta a la icónica Ariel. A su lado, se encontraban el talentoso Javier Bardem y el increíble equipo de Walt Disney Pictures, todos compartiendo la emoción por lo que está por venir.
Durante su gira promocional en México, Bailey recibió una invitación para aparecer en el popular programa Venga la Alegría. Durante la entrevista, el conductor Patricio Borghetti hizo un comentario desafortunado en vivo, lo cual puso a la actriz en una situación incómoda. Aunque Halle intentó disimular su incomodidad, parece que la situación llegó a conocimiento de los ejecutivos de Disney.
Durante su aparición en TV Azteca, Pato le hizo un comentario a Halle diciendo: "Ayer, en la premiere de la película, nadie en esa sala estaba prestando atención al color de tu piel". Sin embargo, este comentario generó una avalancha de críticas en las redes sociales hacia el actor y cantante, acusándolo de "racista" debido a su elección de palabras.
En un intento por defenderse, Borghetti compartió en Twitter: "Siento pena y un poco de vergüenza de que intentes convertir palabras de amor en algo así (...) Le expresé que estaba creando historia y cambiando el mundo para mejor. Ella lo recibió con gratitud y cariño".
No obstante, según informó el periódico El Universal, a pesar de que Bailey generalmente evita prestar atención a comentarios que puedan herirla, en esta ocasión decidió no pasar por alto la situación y expresó su molestia a altos ejecutivos del estudio. Les pidió que no la expusieran nuevamente a este tipo de situaciones.